20.12.08

 

Hasta el próximo año

Antes de ir a lejanas y frías tierras, quiero dejar un mensaje con mis deseos de felicidad a todos los que se pasen por aquí estos días. Y como expresión de mis mejores deseos, os dejo un pequeño regalo, un villancico en esperanto:

Si quieres uno más clásico, puedes escuchar en mp3, el Paca nokt'. Ambos son del magnífico coro "Akordo". Y si lo prefieres, pásate por mi blog en esperanto, donde hay una versión en vídeo.

Lo dicho: ¡a descansar y pasar un buen año!


16.12.08

 

La importancia de las personas

Es difícil juzgar la importancia objetiva de las personas. ¿Quién debe figurar en la Wikipedia? ¿Quién merece una necrológica en un periódico? Ya me quejé hace unos días de la poca importancia que se da a los científicos, y utilizaba este ejemplo de las necrológicas para argumentarlo. Como esperantista también me suele molestar que personas que considero muy relevantes, pero quizás demasiado alejadas de los circuitos de poder, sean relegadas por los medios tradicionales. Recuerdo cómo me molestó que no apareciera en los periódicos nacionales el fallecimiento de Fernando de Diego, el traductor del Quijote al esperanto, justo cuando estábamos a punto de hacerle un homenaje público, y aún más por la coincidencia de que durante esos días apareciera la necrológica de alguien cuyo único mérito era el haber sido marido de una actriz de Hollywood.

También ocurre lo contrario: que uno no aprecie los méritos de alguien cercano hasta que no se lo recuerdan en su necrológica. Me acaba de pasar con dos esperantistas, que conocía por este motivo, pero cuya importancia fuera de este círculo me acaba de ser descubierta.

El primero ha sido el caso de Forrest Ackerman. A Forry le mencionaba en mi artículo sobre el esperanto y el cine, como coleccionista de elementos relacionados con este arte, pero debo confesar que hasta ahora apenas era consciente de la gran estima que se le tiene en el mundo de la ciencia-ficción y el cine fantástico. Lo he tenido que comprobar ahora, cuando con ocasión de su muerte, incluso “El País” no sólo le dedica un largo artículo sino que incluso menciona su relación con el esperanto. Es impresionante descubrir lo querido que era por parte de los fanáticos de este género.

Parecido es el caso de Ralph Lewin, al que apenas había prestado atención hasta este momento, a pesar de ser el co-traductor de una de las obras que más me gustan en esperanto: Winnie-la-Pu. Me apetece mucho mencionar este libro porque suele resultar muy chocante: tenemos una imagen errónea de la obra, quizás por la influencia de la película, cuando en realidad es una historia magnífica, al menos cuando la leo en esperanto. De hecho, no sólo la suelo mencionar en charlas, como la que di este jueves pasado en un colegio de Madrid, sino que ocupa un lugar especial en mi página sobre el esperanto y el humor. Pero ha tenido que llegar su muerte para que supiera que Lewin era además un biólogo marino muy destacado, con una carrera profesional amplia y apreciada. Incluso un tipo de bacterias, Lewinella, se llama así en su honor. Es una lástima que haya tardado tanto en escribir algo sobre él, pero me alegra al menos haber podido al fin agradecerle los buenos momentos de lectura: “Fallece el padre de las algas verdes” y en viquipedia.

Es otra buena consecuencia de saber esperanto: que tus méritos se pueden dar a conocer por encima de las fronteras y de las especializaciones.


15.12.08

 

Todos tenemos nuestro día

Hoy es, otra vez más, el Día del Esperanto. Así que hoy toca un blog bilingüe. Primero te lo cuento en esperanto, y más abajo va la traducción:

Hodiaŭ, en la Tago de Esperanto, okazas multo. Komence, mi verkas dulingvan blogon, konforme al la tradicio kiun ni komencis antaŭ du jaroj. Estis kreita speciala blogo por helpi al neesperantistoj kiuj volas aliĝi al la iniciato, sed ni ne multe diskonigis ĝin, kaj do mi ne esperas ke ĉifoje ĝi estos multe uzata. Restu tamen por venonta jaro, kiam ni havos pli da tempo.
Disvolviĝos la konferenco en la sidejo de Unesko, pri kiu vi povas legi tie ĉi esperante, kaj tie ĉi hispane.
Okazos festoj kaj internaj renkontiĝoj. En Madrido ni antaŭigis ĝin du tagojn, kaj ni kunmanĝis sabate. La pruvojn vi povas vidi en la ipernitiejojn de Manolo kaj Alejandro.
Hodiaŭ ni eklaboras super projekto por celebri venontjare la 150-an datrevenon de la naskiĝo de Doktoro Zamenhof.
Kaj kompreneble, ni legos libron en Esperanto, ja tiel estis kiel ĉio ekis.

Hoy es el Día del Esperanto, y ocurrirán muchas cosas. En primer lugar, escribo un blog bilingüe, conforme a la tradición que iniciamos hace un par de años. Se ha creado un blog especial para ayudar a no esperantistas que quieran sumarse a la iniciativa, pero no lo hemos publicitado mucho, así que supongo que este año no se usará mucho. Que quede para el año que viene, cuando tengamos más tiempo.
Luego está la conferencia que va a tener lugar en la sede de la Unesco, sobre la que puedes leer aquí en esperanto y en español.
También habrá fiestas y reuniones internas. En Madrid lo adelantamos dos días, y estuvimos comiendo el sábado. La prueba puede verse en los espacios de Manolo y Alejandro.
Hoy empezaremos a trabajar en el proyecto para celebrar este año que viene el 150 aniversario del nacimiento del Doctor Zamenhof.
Y, por supuesto, leeremos un libro en esperanto, que es como empezó todo.


2.12.08

 

Arqueología al servicio del nacionalismo

Todo nacionalismo necesita tradiciones, y a menudo tradiciones inventadas, de acuerdo con el título del famoso libro editado por Hobsbawm y Ranger. Esta invención puede tener una base real, es decir, las nuevas tradiciones proceden de la recreación, maquillaje, depuración y oficialización de antiguas costumbres de un grupo que se considera representativo. Pero también se las puede crear de nuevo, y si es necesario, se las falsifica. El citado libro contiene ejemplos de ambos tipos, y entre los últimos, quizás ninguno es tan curioso como el descubrimiento de que las faldas escocesas y los tartanes de los clanes, que tanto se asocian con lo escocés, son invenciones procedentes del ejército británico en los siglos 18 y 19 (ya se sabía de antes que el nacionalismo escocés posee otra embarazosa falsificación, el poema de Ossian, lo que ya constituye un récord)

Las falsificaciones más habituales se relacionan con libros y documentos (los Plomos del Sacromonte, los Protocolos de los Sabio de Sión, etc), pero también la arqueología pétrea puede valer. Es más trabajosa y más arriesgada, pero proporciona rendimientos mayores. En España tenemos un destacado ejemplo, que tanto contribuyó al desarrollo del impulso patriótico cuando hizo falta frente al enemigo de otra religión: el descubrimiento de la tumba de Santiago.

Este conocido fraude, que todavía hoy arrastra a tanta gente por los caminos (a los que hemos paseado por el campo castellano en los mediodías de verano no nos extraña que haya quien experimente visiones o experiencias espirituales), lo relaciono con el nacionalismo, un fenómeno muy posterior, no por capricho, sino porque veo a ambos fenómenos, patriotismo y religión popular, como dos manifestaciones de un mismo concepto, el grupalismo. Ambos están también relacionados en otro conocido fraude, la aparición de la Virgen de Guadalupe al indio Juan Diego, una invención que permitió unir el patriotismo mejicano y el tradicionalismo católico y que se describe en esta página (que tengo traducida al esperanto en esta web).

El uso de los fraudes religiosos y las reliquias para legitimar el nacionalismo o el localismo no es ahora tan común en las sociedades occidentales, pero no olvidemos algún caso en España todavía en el siglo pasado, o el uso por el nacionalismo vasco de las apariciones de Ezkioga en 1931, frente a los nuevos usos republicanos. Y tampoco olvidemos que algunas falsificaciones pueden tener consecuencias incluso hoy: no se podría explicar la existencia del Vaticano sin recordar la falsa “Donación de Constantino”.

Los modernos patriotismos no necesitan tanto de la religión, y en una sociedad laica, la historia y la arqueología pueden asumir este papel para justificar la tendencia a la diferencia. Así que no me ha extrañado nada el episodio que ahora se ha descubierto en el País Vasco: que un descubrimiento arqueológico que se difundió a bombo y platillo, y que sirvió para justificar la antigüedad de la lengua vasca en un territorio definido, se haya convertido en una falsificación embarazosa.

Vascos y vascones

El fondo del asunto, a lo que he visto, tiene que ver con la antigüedad del poblamiento de las actuales provincias vascongadas por los vascones, y la tradición de la lengua vasca en ese territorio. Es un tema que me parece muy interesante, como en general resulta intelectualmente atractivo todo lo relacionado con la prehistoria del poblamiento de la Península Ibérica antes de la llegada de los romanos. Me consta que llama la atención incluso fuera de la Península, y he procurado resumirlo para mis lectores de fuera de la Península en mi blog en esperanto.

Por desgracia, he comprobado que de este interés intelectual es muy fácil construir deducciones en el vacío y llegar a conclusiones políticas o ideológicas. Un vistazo a la Red encuentra rápidamente textos con las interpretaciones más diversas, y tampoco parece que los especialistas se libren de la tendencia a efectuar tales saltos y a explicar el pasado pensando en el futuro.

Probablemente, por esta razón se encuentra tanto material, científico y popular, sobre los vascones, en comparación con otros pueblos que en aquel tiempo tuvieron más importancia. Porque si algo llama la atención en las monografías desapasionadas sobre historia antigua (ver, por ejemplo, “Los pueblos prerromanos de la Península Ibérica”, del profesor Manuel Salinas de Frías, un texto de divulgación que a mí me parece magnífico) es comprobar que los que ahora se consideran como antecesores de los vascos fueron un pueblo sin especial interés para los romanos, quizás porque, al contrario de lo que dice el mito, no se distinguieron por su afán de independencia y su resistencia a la conquista latina.

En cualquier caso, el fondo del asunto, el debate sobre la existencia o no de una vasconización tardía en el actual territorio de la Comunidad Autónoma del País Vasco, está explicado bastante bien en el correspondiente artículo de la Wikipedia, y a él me remito. Se trata de un asunto que sería muy interesante desde el punto de vista histórico y filológico, pero que está echado a perder por las implicaciones que tan a menudo se hacen sobre los derechos territoriales, las relaciones con España, los derechos de los emigrantes, el status de la lengua vasca o la situación política de Navarra.

Veleia

Así que no es de extrañar que cuando hace un par de años se descubrieron diversos materiales, con inscripciones en vasco y otros dibujos igualmente espectaculares, en el yacimiento de Veleia, en Iruña, cerca de Vitoria, se produjera una fuerte repercusión en medios políticos, mediáticos, intelectuales y populares vascos. Al fin y al cabo, se trataría de la definitiva refutación de la citada hipótesis de la vasconización tardía, y el destrone de La Rioja como el primer lugar donde aparecieron textos escritos en eusquera.

Ahora se ha descubierto que se trata de una falsificación. Los detalles se pueden seguir en la web Magonia, de Luis Alfonso Gámez, un periodista especializado en el reportaje sobre pseudociencias, fraudes, y actividades similares (suyo es el texto sobre Juan Diego, al que aludí anteriormente). Las noticias han saltado también a otros países (puede leerse una nota en The Guardian).

Los descubrimientos eran ya dudosos desde un principio, cuando se anunciaron a través de los medios de comunicación, y cuando se conoce la naturaleza del material: inscripciones de estilo egipcio, una cruz con la sigla RIP, en vez de INRI, palabras demasiado parecidas al eusquera actual, como si éste fuera el único idioma mundial que no ha evolucionado... Pero la posibilidad de justificar tradiciones antiguas cegó hasta a los más inteligentes.

Todavía no se conocen los detalles. Tampoco se puede asegurar que el fraude tenía motivos políticos. Es posible que no, y que se deba a celos o a enfrentamientos entre especialistas, o incluso a una gamberrada. Pero sí hubo motivos ideológicos, de diversas tendencias, en la utilización del descubrimiento. No faltaron atribuciones nacionalistas o localistas. Y algunos de quienes tuvieron dudas se las callaron para no involucrarse en un ambiente venenoso.

¿Será a partir de ahora el debate sobre naciones y patrias, sobre historia y lenguas, más racional y más pegado a los intereses de los habitantes actuales de esos territorios?

Por supuesto que no, la manipulación de la historia es un componente fundamental de cualquier localismo.